El atacante del Bayern de Múnich Kingsley Coman ha recibido insultos racistas tras perder la final del Mundial y fallar su lanzamiento desde el punto de penalti. El club reacciona.
El FC Bayern de Múnich ha condenado «en los términos más enérgicos posibles» los insultos racistas proferidos contra su jugador de ataque Kingsley Coman tras perder la final de la Copa del Mundo. «La familia del FC Bayern está a tu lado, querido Rey: el racismo no tiene cabida en el deporte ni en nuestra sociedad», tuiteó el lunes el club de fútbol de la Bundesliga.
Francia había perdido el domingo por la noche la final del Mundial contra los argentinos de Messi por 4-2 en la tanda de penaltis. Coman falló desde el punto de penalti, al igual que su compañero Aurélien Tchouaméni. Coman recibió insultos racistas en las redes sociales por ello.
Los internacionales ingleses Bukayo Saka, Jadon Sancho y Marcus Rashford ya experimentaron una hostilidad similar en el verano de 2021 tras fallar sus penaltis en la final perdida de la Eurocopa contra Italia.