Un entrenador de la Serie A da un cabezazo y es despedido

Escándalo en la Serie A: el entrenador del US Lecce, Roberto D’Aversa, ha perdido su puesto tras propinar un cabezazo a Thomas Henry, delantero del Hellas Verona.

El US Lecce y el Hellas Verona han llegado a las manos en la lucha por el descenso en la Serie A italiana. Después de que el Hellas celebrara su victoria a domicilio por 1-0, con lo que superaba al Lecce y salía de los puestos de descenso, el entrenador del Lecce, Roberto D’Aversa, perdió los nervios.

El técnico irrumpió en el campo tras el pitido final y propinó un cabezazo al delantero rival Thomas Henry. El francés cayó al suelo y se produjo una reyerta. Ambos protagonistas vieron la tarjeta roja.

Sin embargo, D’Aversa no se detuvo ahí. Después de que en un principio el US Lecce sólo se distanciara públicamente de las acciones de su entrenador en un comunicado el domingo, las consecuencias llegaron el lunes: «Tras los acontecimientos ocurridos al final del partido entre el Lecce y el Verona, el US Lecce anuncia que el entrenador Roberto D’Aversa ha sido relevado de sus funciones», anunció el club.

El entrenador D’Aversa contradice

El propio entrenador ya había comentado los incidentes a través de las redes sociales tras el partido y, a pesar de las claras imágenes, contradijo las acusaciones. «Entré en contacto directo con Henry, pero ni le di un cabezazo ni recibí ninguno de él», dijo D’Aversa, explicando su versión de los hechos. «Fue una imagen antideportiva fruto de una gran tensión y adrenalina, pero eso no deben ser mis excusas ni atenuantes», se disculpó no obstante por ser «un mal ejemplo».

Henry, atacante del Hellas, también se pronunció en las redes sociales. «Pido disculpas por reaccionar con palabras a las muchas provocaciones de hoy en el campo. Pero eso no justifica ni justificará nunca que te den un cabezazo cuando ya estás camino de los vestuarios y disfrutando de los tres puntos que mereces.» Sobre todo porque no había provocado a su compatriota Valentin Gendrey, junto al que se encontraba en el momento del cabezazo. «Le conozco desde hace 15 años y nunca me atrevería a provocar a alguien a quien considero un hermano. «