En el partido más destacado de la 3ª división, el Rot-Weiss Essen consigue un empate a 2 (2:1) en el campo del Dynamo Dresden. Felix Götze se lesiona la cabeza en los compases finales.
Obviamente, había mucha frustración entre los aficionados del Dynamo Dresden. En el partido cumbre de la 3ª división contra el Rot-Weiss Essen, los candidatos al ascenso sólo lograron un empate a 2:2 (1:2) a pesar de dominar el encuentro.
En el tiempo añadido del turbulento partido, algunos aficionados de los anfitriones demostraron por qué el club lleva años luchando sin éxito contra su mala reputación en el fútbol alemán. El defensa del RWE Felix Götze recibió un golpe tan fuerte en la cabeza en un choque con Jakob Lemmer, del Dresde, que cayó al suelo y sangró profusamente. El partido se acabó para el central del Essen.
Mientras el hermano del campeón del mundo de Río, Mario Götze, era sacado del terreno de juego en camilla, el bloque de seguidores del Dinamo le acompañaba con fuertes gritos de «adiós». Los paramédicos utilizaron paraguas para proteger al jugador del Essen de los proyectiles lanzados desde la grada.
Andreas Mann, comentarista del canal de televisión Magenta Sport, calificó los gritos de los seguidores del Dinamo de «irrespetuosos» y «de cajón».
Felix Götze, defensa del RWE, lesionado: lo que dice Dabrowski
Como el Rot-Weiss Essen ya había agotado todas sus sustituciones, tuvo que sobrevivir los tres minutos restantes con un jugador menos. Lo consiguieron, pero después Götze se mostró muy preocupado. «Esperamos que sólo sea una laceración y que Felix no haya sufrido ninguna fractura», dijo el entrenador del RWE, Christoph Dabrowski, en Magenta Sport.
Para el Essen, fue un empate afortunado dado el desarrollo del partido. El Dinamo jugó con unos delanteros espectaculares en la primera parte. Sólo el extraordinario guardameta del RWE Jakob Golz mantuvo el partido abierto con un puñado de paradas brillantes.
Cedric Harenbrock (minuto 7) y Thomas Eisfeld (35) adelantaron a los visitantes en dos ocasiones. Tom Zimmerschied (11/47) igualó el marcador en ambas ocasiones. El partido en el estadio Rudolf Harbig fue presenciado por 30.387 espectadores