Después del Preußen Münster, el 1. FC Köln ha sido ahora multado con una multa récord. El club tiene que pagar casi 600 000 euros. ¿Cuánto puede usted estar por encima del club? Un comentario.
La pandemia de coronavirus ha dado una nueva dimensión a la quema de pirotecnia en los estadios de Alemania.
Hace que uno se pregunte qué pasa por la mente de las personas que quieren superarse una y otra vez. Cada fin de semana, se oyen fuegos artificiales y explosiones en las gradas de todo el país.
Aparte del hecho de que es extremadamente peligroso y ya ha habido varios heridos, tampoco tiene el más mínimo beneficio para el club. Al contrario: hay multas récord.
En los medios deportivos, la palabra multa récord podría ser la más utilizada en 2023. El caso más reciente fue el del Preußen Münster, que fue multado con una suma de seis cifras por sus «fuegos artificiales» en la Copa DFB contra el FC Bayern de Múnich. Solo un porcentaje o más del presupuesto anual despilfarrado. Felicitaciones a los hooligans.
El Schalke pronto recibirá más correo del tribunal de la DFB. Por un lado, por la chorrada pirotécnica en Rostock, que los aficionados del S04 remataron con disturbios que provocaron una interrupción del partido de casi 30 minutos. Aquí también es probable que la sanción sea de seis cifras. Respeto.
El último caso es el del 1. FC Köln. Celebraron una victoria en casa en una primera mitad de temporada casi vergonzosa. La victoria fue en el derbi contra el Borussia Mönchengladbach. Pero la gente ya no hablará de la victoria por 3-1, sino del arte de los hooligans para convertir una victoria en un derbi en una multa récord.
El club tiene que pagar 595 000 euros. ¡Menuda multa! Casi parece una broma que 198 000 euros de ella se puedan invertir en medidas de seguridad o prevención de la violencia.
Para decirlo en lenguaje de aficionado, más vale que lo quemen, o que lo prendan fuego con pirotecnia. Porque los espectadores que se alegran semana tras semana de haberle quitado algo del presupuesto al club que supuestamente tanto aman ya no parecen estar a la altura de los tiempos. Se ponen por encima del club, son megalómanos, hay que mantenerlos fuera de los estadios.
La única forma de detenerlos es imponer castigos severos. En primer lugar, contra los clubes, si encuentran a los idiotas responsables, deben ser tratados con severidad.
Porque para el Münster, el Schalke o el Colonia ya está claro: estos castigos evitarán al menos una transferencia de invierno, si es que el FC consigue fichar a algún jugador, pero eso es harina de otro costal, ya que se espera la sentencia del TAS en breve.
No hay mucha urgencia para que el Münster haga un movimiento, pero el Schalke y el Colonia necesitan urgentemente nuevos jugadores. Sin embargo, uno de cada uno ya ha sido archivado debido al comportamiento vergonzoso, porque el dinero fue a la DFB.
Solo podemos esperar que estos visitantes del estadio nunca vuelvan a parlotear sobre cómo son el club o que el club significa tanto para ellos. Porque con cada bengala que encienden, demuestran lo contrario.