Antes del clásico contra el BVB: el Bayern vence al París

El Bayern quiere pasar directamente a los octavos de final de la Liga de Campeones. Para ello, debe quedar entre los ocho primeros. Tras el primer gol de Kim contra el París Saint-Germain, el objetivo vuelve a estar al alcance.

El FC Bayern de Múnich ha comenzado su decisiva semana de partidos importantes con una victoria muy importante en el clásico de la Liga de Campeones contra el París Saint-Germain. Tras el ajustado pero merecido 1-0 (1-0) gracias al primer gol en la máxima competición europea del defensa Minjae Kim (minuto 38), el campeón alemán de fútbol vuelve a estar en plena lucha por un puesto entre los ocho mejores y el pase directo a octavos de final tras su tercera victoria en cinco partidos. Sin embargo, aún deben seguir otras victorias.

Tras la séptima victoria consecutiva sin encajar ningún gol, el entrenador Vincent Kompany puede afrontar con más tranquilidad las importantes citas del próximo sábado en la Bundesliga, contra el Borussia Dortmund, y finalmente en la Copa DFB contra el vigente campeón, el Bayer Leverkusen. Por su parte, el PSG, con solo cuatro puntos, corre el riesgo de quedar eliminado prematuramente de la Liga de Campeones tras la fase de grupos.

Tarjeta amarilla para Dembéle, Musiala al poste

El gol de Kim decidió el partido. La segunda jugada clave fue la expulsión del delantero del PSG Ousmane Dembelé. El exjugador del Dortmund, que ya había sido amonestado, derribó con una entrada violenta al defensa del Bayern Alphonso Davies en el minuto 56. La consecuencia fue la tarjeta amarilla-roja.

Con superioridad numérica, el Bayern buscó el 2-0 definitivo, pero sin perder el control defensivo. Jamal Musiala estrelló un disparo en el poste (74′), y los locales desperdiciaron varios contraataques. Así, el partido se mantuvo emocionante hasta el tiempo añadido.

«No va a ser aburrido», había pronosticado el entrenador del Bayern, Kompany, antes del duelo entre dos equipos con gran posesión del balón. Y así fue. Los 75 000 espectadores que llenaban el estadio vieron un fútbol rápido y de persecución. Ambos equipos querían tener el balón en todo momento, aunque el Bayern actuó con más determinación cuando lo tenía. Ya en el minuto 7, el internacional Jamal Musiala pudo haber adelantado a los locales tras un pase de Joshua Kimmich. Pero el portero del PSG, Matwei Safonow, realizó una brillante parada.

El héroe de la final como activo

En el 1-0 del Múnich, la cosa fue diferente. El ruso de 25 años rechazó mal un córner de Kimmich y permitió incluso a Kim marcar su primer gol en la Liga de Campeones. La ventaja era merecida. Kingsley Coman fue un activo en el ataque del Bayern.

El extremo nacido en París y formado en el PSG, que marcó de cabeza el gol de la victoria por 1-0 en la final de Lisboa contra su antiguo club en la final de la Liga de Campeones de 2020, tuvo numerosas ocasiones. Lo que le faltó fue el remate final, primero tras una bonita jugada individual (28′) y luego en una posición ideal tras un pase de Harry Kane (66′).

Cuatro días después de su hat-trick en la victoria por 3-0 contra el FC Augsburgo el martes por la noche, el inglés fue principalmente un trabajador ofensivo y defensivo para su equipo. Sin embargo, la presión de tener que ganar a toda costa no paralizó al Bayern. La defensa, con el goleador Kim y Dayot Upemacano, volvió a mostrarse sólida y apenas concedió ocasiones al PSG. Warren Zaire-Emery, de 18 años, falló ante la portería (29′), y el portero del Bayern, Manuel Neuer, detuvo sin problemas un disparo de Dembelé (32′).