El FC Hansa Rostock viaja el sábado (20 de septiembre, 14:00 h) al Rot-Weiss Essen. El Hansa-Kogge está que arde.
El FC Hansa Rostock va viento en popa: el próximo gran partido de la 3.ª división está a la vuelta de la esquina: tras el empate a cero en el Bremer Brücke contra el VfL Osnabrück y la victoria por 2-1 en casa contra el TSV 1860 München el pasado miércoles, el sábado que viene volverá a haber mucha emoción. El rival: el Rot-Weiss Essen. El estadio de la Hafenstraße está lleno, con 19 000 espectadores. Entre ellos se encuentran 1900 seguidores del FC Hansa en la grada visitante.
Essen y Rostock: dos clubes que cuentan con las mejores plantillas de la 3.ª división. La mayor diferencia entre ambos equipos es que, mientras que el FC Hansa solo ha marcado cuatro goles y ha encajado tres en lo que va de temporada, el Essen ya suma doce tantos.
Por otro lado, el Rot-Weiss Essen ha encajado ya diez goles en los seis partidos de liga disputados hasta ahora.
Sin embargo, el veterano del RWE Klaus Gjasula no ve motivos para preocuparse: «Es la sexta jornada y sé que otros equipos están avanzando, pero debemos centrarnos en nosotros mismos. La temporada aún es larga y no es bueno ponerse nerviosos ahora», declaró tras el 1-1 contra el VfL Osnabrück.
Pero el Essen debería ganar contra el Rostock para mantener contentos a los aficionados. Porque tras el 1-1 contra el 1860, el 2-3 contra el Aachen y el 1-1 contra el Osnabrück, es hora de ganar en el cuarto partido en casa de la temporada 2025/2026. En el pasado, ambos equipos solo se han enfrentado seis veces en un partido oficial. El Hansa ganó dos de esos partidos y el Essen, tres. En una ocasión, ambos clubes empataron. El último partido en la Hafenstraße se saldó con una ajustada victoria por 2-1 para los locales. A pesar de un buen comienzo y del gol inicial del exjugador del Essen Cedric Harenbrock, el RWE le dio la vuelta al partido, favorecido por la expulsión de Alexander Rossipal.
Desde el punto de vista de los de la ciudad del mar Báltico, el sábado las cosas deben ser diferentes. «Esperamos un rival fuerte ante un buen público. Siempre es desagradable jugar en la Hafenstraße, pero queremos salir de esta semana inglesa con siete puntos», declaró el defensa central Ahmet Gürleyen tras el último entrenamiento del viernes, marcando el objetivo para el partido fuera de casa en la cuenca del Ruhr.