El Rot-Weiss Essen se defiende contra la larga suspensión de Klaus Gjasula, que amenaza al veterano tras su expulsión en Mannheim.
La tarjeta roja de Klaus Gjasula en el partido contra el Waldhof Mannheim sigue siendo objeto de gran debate varios días después. El centrocampista del Rot-Weiss Essen fue expulsado del campo, aunque no golpeó con fuerza a su rival Kennedy Okpala.
Según ha podido saber esta redacción, el veterano podría ser sancionado por la DFB con cuatro partidos de liga tras su expulsión. Además, el jugador de 35 años deberá pagar una multa de 1000 euros por sus críticas al árbitro en una entrevista con «Magenta Sport».
La Comisión de Control de la DFB ha solicitado esta sanción, pero el Rot-Weiss Essen se opone al importe de la misma y ha presentado un recurso contra la demanda.
El director deportivo del RWE, Christian Flüthmann, fue preguntado sobre este tema durante el descanso del partido entre el Rot-Weiss Essen y el TSG Hoffenheim II (3-1) el miércoles por la noche. «El procedimiento aún está en curso. Dos partidos son por la falta y dos por el contacto físico. La entrevista no influye en la sanción. Hemos presentado una apelación y veremos qué resultado tiene», declaró Flüthmann en una entrevista con «Magenta Sport».
Además, Gjasula acaparó los titulares de toda Alemania con la emotiva entrevista que concedió tras la goleada por 1-6 del Essen en Mannheim. Gjasula se enfadó mucho por haber sido expulsado con tarjeta roja directa en el minuto 68. Su enfado era comprensible, ya que se trataba de una decisión errónea. A raíz de ello, el centrocampista exigió sanciones para los árbitros. «Si un trabajador la caga, su jefe le sanciona. Lo mismo debe ocurrir con los árbitros», protestó el jugador de 35 años del RWE.
Al ser preguntado por la declaración de su jugador, Flüthmann explicó: «Después de un partido así, se pueden entender ciertas frases que se dicen por la emoción del momento. El hecho es que, por supuesto, no estamos satisfechos con la decisión y seguimos pensando que no es correcta».
El técnico de 43 años defendió a Gjasula: «Creo que Klaus Gjasula ya no diría muchas de las frases que se han sacado de contexto. Pero, en esencia, se puede entender. Él también dice que no se debe mostrar la tarjeta roja inmediatamente en todas las situaciones».
Ahora es importante debatir de forma objetiva si en el futuro se seguirán imponiendo sanciones tan largas que, como en este caso, se basan en decisiones erróneas. Flüthmann: «Se trata de decisiones que, a posteriori, resultan ser erróneas. ¿Qué ocurre entonces? Quizás tengamos que encontrar una solución, porque no hay asistente de vídeo y no se puede corregir una decisión durante el partido».