El SV Lippstadt ha tenido hasta ahora una temporada más que buena en la Oberliga Westfalen. Sin embargo, esto no cambia nada en cuanto a los objetivos.

El SV Lippstadt llega al parón invernal de la Oberliga Westfalen como primer perseguidor del líder, el SG Wattenscheid 09. Así, las posibilidades de ascenso parecen grandes. Sin embargo, el director deportivo del SVL, Dirk Brökelmann, adopta un tono muy diferente y se refiere a los objetivos fijados antes de la temporada.

Dirk Brökelmann, ¿cómo valora la primera vuelta?

Para nosotros, la primera vuelta ha sido muy satisfactoria y exitosa hasta ahora. Vemos una evolución dentro de nuestra plantilla, de nuestro equipo. Estamos totalmente de acuerdo con la clasificación actual. Siempre hay cosas en las que se puede trabajar, que se pueden mejorar. Esos son nuestros objetivos para la segunda vuelta y luego ya veremos qué sale de ahí.

¿Cuál ha sido para usted el momento más destacado hasta ahora?

Sin duda, la última jornada, con un partido absolutamente espectacular contra el SG Wattenscheid 09. Sin duda, es algo que quedará en el recuerdo, no solo por el fallo del alumbrado, sino también por la calidad que ambos equipos demostraron sobre el terreno de juego, y que fue uno de los momentos más destacados de esta primera vuelta.

¿Y cuál ha sido la experiencia más negativa?

Que en algún que otro partido no hemos rendido al máximo. Me refiero concretamente a la primera parte del partido contra el Rot Weiss Ahlen, que al final perdimos. Sin duda, fue una de nuestras peores partes de la temporada. Pero sacamos las conclusiones adecuadas y seguimos bien en la temporada. ¿Habrá cambios en la plantilla durante el parón invernal? No hay nada previsto en cuanto a salidas o incorporaciones.

¿Qué objetivo persiguen para el resto de la temporada?

Hemos dicho claramente que nuestro objetivo es quedar entre los seis primeros de la liga. Y ese sigue siendo nuestro objetivo. No vamos a cambiar nada al respecto. Y aunque no guste o suene a tópico: en la segunda vuelta también iremos partido a partido y daremos lo mejor de nosotros mismos. Y si al final lo mejor es quedar entre los dos primeros, lo aceptaremos con mucho gusto. Pero eso no cambia nuestro objetivo y no vamos a cambiar de rumbo.