El que fuera niño prodigio Youssoufa Moukoko aún no ha perdido la esperanza de tener una gran carrera futbolística. «Saldré de esta, lo sé», afirmó el jugador más joven de la historia de la Bundesliga en una entrevista con la revista Kicker sobre su último bajón de forma. Antes del reencuentro con el Borussia Dortmund en la Liga de Campeones el martes (21:00 h/DAZN), el jugador de 20 años suma cuatro goles en 20 partidos con el FC Copenhague. «Soy mi mayor crítico. Sé que ese no es mi nivel», dijo Moukoko y subrayó: «Sé que voy a ayudar a este equipo».
«Probablemente todo el mundo esperaba que fuera a Dinamarca y arrasara en la liga, pero llevaba dos años sin jugar casi nunca los 90 minutos. De repente, jugar cada tres días es todo un reto».
En su camino hacia sí mismo, el tiempo que pasó en Francia le ayudó mucho. «Muchos no lo entenderán cuando lo diga, pero Niza fue lo mejor que me pudo pasar», comentó Moukoko sobre su cesión la temporada pasada. «En Niza aprendí a tener paciencia, a controlar mis emociones y a no señalar con el dedo a otras personas», añadió Moukoko: «En Dortmund, siempre era culpa del entrenador cuando no jugaba, en Niza aprendí a buscar la culpa primero en mí mismo antes de mirar a los demás».