El sábado, el FC Schalke 04 jugará contra el Twente Enschede. El partido de prueba entre los clubes amigos electriza a los aficionados. Se esperan muchos espectadores en el estadio.

El ensayo general de la temporada del FC Schalke 04 en la 2ª Bundesliga contra el Twente Enschede tendrá lugar el sábado (13.30 horas) en el Schalker Arena.

El equipo quiere dar una buena imagen una semana antes del inicio de la temporada liguera en el campo del Hamburger SV. Es de esperar que el entrenador del Schalke, Thomas Reis, ponga ya sobre el terreno de juego a gran parte del equipo, lo que debería garantizar un buen comienzo de temporada en el HSV.

Y quizás el objetivo contra el club amigo de la Eredivisie holandesa sea también tomarse un poco de revancha por la derrota del año pasado. Hace exactamente un año ya se disputó este partido. En aquella ocasión tuvo lugar en el estadio «De Grolsch Veste» de Enschede. El Twente se impuso por 3:1 al Knappen, que acababa de regresar a la Bundesliga, con dos goles en los últimos minutos. Marcin Kaminski había adelantado al S04 con un gol tempranero a los nueve minutos.

Pero aún más memorable que el partido fue la celebración de los hinchas antes del encuentro. Cientos de seguidores de Tukkers y Knappen celebraron juntos su amistad al ritmo de música pop holandesa antes del saque inicial, frente al estadio y en el pub adyacente.

La amistad entre hinchas tiene su origen en los años 90

Se remonta a la década de 1990. Por aquel entonces, la escena de Gelsen y la Twente Hooligan Firm confraternizaban. Hoy se vive desde hace más de 15 años, especialmente entre los grupos ultras Ultras Gelsenkirchen y VAK-P. Tras el partido amistoso de antes de la temporada pasada, hubo ruidosas celebraciones en el pub del VAK-P durante mucho tiempo. Lo mismo ocurrirá este año en Gelsenkirchen.

En Holanda se esperaba que entre 15.000 y 20.000 personas asistieran a este inusual partido de prueba el año pasado. Pero acudieron 26.000. Sin duda, al FC Schalke 04 le gustaría superar esa cifra el sábado. Y podría lograrlo. «Esperamos unos 30.000 espectadores», explica Marc Siekmann, portavoz del club.