A sus casi 70 años, el «dios de los centros» Rüdiger Abramczik sigue entrenando al equipo tradicional del FC Schalke 04 en el 19.º NRW-Traditionsmasters en Mülheim.

Cuando el 4 de enero de 2026 se celebre el 19.º NRW-Traditionsmasters en el Westenergie Sporthalle Mülheim, Rüdiger Abramczik estará presente, como siempre, con el equipo tradicional del FC Schalke 04. Porque 19 años de NRW-Traditionsmasters son también 19 años de «Abi»-Ball. Sin el emblemático extremo derecho del Schalke, el torneo no sería lo mismo. «Centrado de Abramczik, Fischer, ¡gol!» fue la fórmula del éxito de muchos goles del Schalke en la década de 1970 y llevó al genial dúo a la selección nacional. En noviembre de 1977, Klaus Fischer marcó el gol del siglo en un partido internacional contra Suiza con una chilena. El centro, que en este caso fue demasiado largo, lo realizó, por supuesto, Rüdiger Abramczik. Tras el final de sus carreras activas, ambos delanteros demostraron su habilidad durante muchos años en el S04-Traditionself. Los dos amigos también jugaron para los Königsblauen en el NRW-Traditionsmasters. «Especialmente en el NRW-Traditionsmasters», corrige Rüdiger Abramczik. «Fueron muchos años estupendos en la pista. Siempre me ha gustado mucho jugar aquí. El NRW Traditionsmasters es insuperable en cuanto a ambiente y organización. Me encantaría volver a ponerme la camiseta azul y jugar hoy mismo».

Sin embargo, como en febrero cumplirá 70 años, en algún momento redujo su tiempo de juego y desde hace algunos años es entrenador del equipo tradicional de los mineros. Porque no quiere perderse el NRW-Traditionsmasters.

«Estar con los chicos, el ambiente en el vestuario y aquí en Mülheim, en el NRW-Traditionsmasters, el ambiente único en el pabellón… Todo eso me divierte muchísimo», explica «Abi». Así que el primer domingo de enero volverá a ponerse con gran ilusión el chándal del S04 y preparará a su equipo para los duelos con los otros clubes.

«Estoy deseando volver a vivir emocionantes duelos contra el VfL Bochum, el 1. FC Köln u otros equipos, cuando el ambiente tan fantástico que se respira aquí hace que parezca que el techo del pabellón va a salir volando», afirma Abramczik con el pulgar hacia arriba.

A pesar de su paso de tres años por el Borussia Dortmund, este nativo de Gelsenkirchen siempre ha sido un seguidor del Schalke. «Por eso, naturalmente, estoy muy contento con el actual auge», explica Abramczik. «Los espectadores han visto dos años de fútbol horrible en el Schalke. Se han ganado que ahora, por fin, las cosas parezcan ir mejor». Sin embargo, subraya, no hay que volver a subir demasiado las expectativas de inmediato, ya que la Bundesliga aún está muy lejos.

Con solo 17 años, «Abi» marcó el primero de sus 58 goles en la Bundesliga en 235 partidos con el Schalke 04. Sin embargo, no se hizo famoso por sus goles, sino sobre todo por sus asistencias. «Ya de joven, a los 16 años, entrenaba con los profesionales», recuerda el futbolista callejero Abramczik, que nació en Gelsenkirchen-Erle y sigue regentando allí su tienda de deportes Abi’s Sportshop.

Ejerce de entrenador del equipo tradicional del S04 junto con otras iconos del Schalke, Klaus «Tanne» Fichtel y Dietmar «Didi» Schacht. «Sigo disfrutando mucho con esta tarea, al igual que con mi trabajo como representante del Schalke. Visito clubes de aficionados o eventos y hablo de los viejos tiempos. Y se me da bien charlar», aclara Abramczik riendo. Eso también le mantiene joven. «Hace poco estuve con «Didi» Schacht en una fiesta con 700 aficionados del S04 en Sauerland. Después estuvimos casi dos horas haciéndonos fotos con los seguidores. En esos momentos se vive de cerca lo importante que sigue siendo este club para la gente». Ese es el mayor activo del club.

Porque sigue siendo un gran conocedor del ambiente del Schalke y, en la medida de lo posible, asiste a todos los partidos en casa de los Königsblauen. Por eso, además de salud, lo que más desea para su cumpleaños redondo es una cosa: «El regreso a la Bundesliga sería el mejor regalo para mí», afirma Abramczik. Le gustaría celebrar el ascenso en mayo, pero no quiere celebrar su cumpleaños por todo lo alto: «Entonces tendría que invitar al menos a 1904 personas. Prefiero largarme», revela «Abi», y renunciar a su querida Gelsenkirchen durante unos días.

¿Y cómo se siente con casi 70 años? «Lo diré así: mejor cumplir 70 años que morir a los 60», responde Rüdiger Abramczik con su característico sentido del humor. Así es como lo conocen y lo quieren en Schalke. Y en Mülheim.