La nueva entrenadora de la selección española femenina, Montse Tomé, ha convocado a jugadoras que están actualmente en huelga. El Gobierno amenaza con sancionar a las futbolistas.
El fútbol femenino español sigue sumido en el caos tras el escándalo del beso protagonizado por el presidente de la Federación, Luis Rubiales, que entretanto ha dimitido.
La nueva seleccionadora nacional, Montse Tomé, considerada una persona de confianza de Rubiales, ha publicado su lista de convocadas para los próximos partidos internacionales y ha incluido en ella a jugadoras que habían pedido no ser convocadas.
Las jugadoras exigen la destitución de las personas de confianza de Rubiales
Con la huelga de los partidos internacionales, las futbolistas quieren mantener la presión sobre la federación. 21 miembros de la selección campeona del mundo y otras 18 jugadoras de primer nivel (algunas de las cuales ya estaban en huelga antes del torneo debido al entonces entrenador Jorge Vilda) exigen, entre otras cosas, la destitución del jefe interino de la RFEF, Pedro Rocha, y de otros funcionarios cercanos a Rubiales.
Jennifer Hermoso, a la que Rubiales besó en la boca sin su consentimiento tras la victoria de España en la final del Mundial de Australia, no fue convocada. Según Tomé, se quería «proteger» a la jugadora. En un tuit, Hermoso preguntó: «¿Protegerme de qué? ¿Y de quién?».
Además, acusó a la RFEF de llevar a cabo una «división» y una «manipulación» para «intimidarnos y amenazarnos con consecuencias legales y sanciones económicas».
La seleccionadora nacional y las jugadoras se contradicen
España quiere clasificarse para los Juegos Olímpicos de París 2024 a través de la Liga de Naciones. Para ello, Tomé ha convocado a 15 campeonas del mundo para los dos primeros partidos de la competición contra Suecia el viernes y contra Suiza el próximo martes.
Tomé aseguró ante la prensa que había hablado con las jugadoras y que ninguna de ellas se había negado a participar. Sin embargo, las jugadoras no estaban de acuerdo y anunciaron que continuarían con su huelga de partidos internacionales.
Aitana Bonmati, elegida mejor jugadora del Mundial, escribió en X, entre otras cosas: «[…] nuestra firme voluntad de no ser nominadas por razones justificadas […] sigue siendo plenamente válida». Hermoso escribió que estaba totalmente del lado de las jugadoras.
El Gobierno amenaza a las jugadoras con sanciones
El Gobierno también está presionando, pero a las futbolistas: «Si las jugadoras no se presentan, el Gobierno, lo siento mucho, tendrá que actuar y hacer cumplir la ley», dijo Víctor Francos, presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD). Según la ley española del deporte, negarse a jugar a pesar de haber sido seleccionado conlleva una multa de entre 3.000 y 30.000 euros y una suspensión de entre 2 y 15 años.
En marcado contraste con ello se encuentra un comunicado de la Federación Española publicado con motivo de la nominación de las jugadoras. En él se afirma: «Garantizamos a las jugadoras un entorno seguro y abogamos por un clima de confianza mutua para asegurar juntos que el fútbol femenino se desarrolle aún más en el futuro».