El fundador de la Baller League ha respondido a las críticas, a veces feroces, de los clubes de aficionados. Quieren coexistir junto a los clubes, dicen.
Los organizadores de la Baller League han rechazado las críticas, a veces feroces, de varios clubes de fútbol aficionado, pero están dispuestos a entablar conversaciones. «Queremos que los jugadores de la Liga de Fútbol Aficionado sigan jugando en los clubes; ésa es otra de las razones por las que estamos dialogando con todo el mundo y estamos encantados de ayudar», declaró el fundador Felix Starck al SID: «La Liga de Fútbol Aficionado siempre ha dicho que estamos encantados de coexistir con los clubes».
Varios clubes de la zona de Colonia dieron recientemente a elegir a sus jugadores si querían seguir jugando en su club o jugar los lunes en la nueva liga cubierta para influencers, ex profesionales y otros. En el club de quinta división FV Bonn-Endenich, cinco jugadores optaron por el nuevo formato y quedaron libres. «No queremos correr el riesgo de lesionarnos», declaró el director deportivo del Endenich, Markus Köppe, quien añadió que también se había perdido la concentración en la lucha por el descenso.
Starck se muestra poco comprensivo con los despidos. «Desde el punto de vista del derecho laboral, es cuestionable prohibir a los jugadores jugar al fútbol en su tiempo libre», dijo. «Por otro lado, es importante subrayar que aquí no se puede acusar a nadie de mala conducta y estos ejemplos demuestran la seriedad con la que se toma nuestra liga y el alto nivel al que se juega. Como Liga Baller, nos dirigimos proactivamente a los clubes. No quería que ningún club diera un ultimátum».