Este joven de 18 años de Düsseldorf pasó el verano pasado del Fortuna a un club de la Bundesliga. Aquí es el capitán y el jugador más destacado.
Kelven Olagie Frees nació y creció en Düsseldorf. Jugó en el TuRU Düsseldorf en sus primeros años -hasta 2013- y luego pasó al club número uno de la ciudad: el Fortuna Düsseldorf.
Tras diez años en el Fortuna, abandonó la capital del estado de Renania del Norte-Westfalia en el verano de 2023 y se incorporó al equipo sub-19 del TSG 1899 Hoffenheim, de la Bundesliga.
Aquí, el gigante defensivo de 2,02 metros impresionó desde el primer día. Es capitán del equipo juvenil A del Hoffenheim y también ha sido convocado recientemente con la selección sub-19 de Alemania.
«He llegado bien aquí, desde el principio se respiraba un ambiente familiar. Al principio me compenetré y me integré en el equipo para hacer mi trabajo. El hecho de que mi carácter y mi actitud se reflejen tan bien en este equipo se debe también a que todos son grandes personas, tienen calidad y un alto nivel. Los responsables han confeccionado una gran plantilla y nuestros entrenadores nos dirigen y organizan muy bien. Mostramos una gran disciplina y ya somos un grupo muy unido», declaró el jugador del Düsseldorf con raíces nigerianas al portal «transfermarkt.de».
Es un puesto de primera para jugadores decididos a alcanzar sus metas. Depende de nosotros, los jugadores, cuánto estemos dispuestos a invertir. Así se madura cada día. Más no se puede
Y añade: «Ser nombrado capitán significa mucho para mí y vivo este papel cada día. Pasaría fuego por mis compañeros y entrenadores». «
Frees recuerda con cariño su etapa en Düsseldorf. Pero las condiciones en el Fortuna son difíciles de comparar con las del TSG. En el Hoffenheim, todo está un nivel por encima.
Kelven Olagie Frees
Frees: «Pasé muy buenos años en Düsseldorf, pero Hoffenheim es aún más grande en cuanto a cantera. Las condiciones en el TSG son sencillamente únicas. Aquí hay oportunidades para trabajar de forma aún más precisa en todos los sentidos. Nos dan todo lo que necesitamos para convertirnos en profesionales, tanto a nivel deportivo como personal. Lo bueno del Hoffenheim es que me dan todas las oportunidades y de mí depende aprovecharlas o no. Es una estación de primera para jugadores decididos a alcanzar sus metas. Depende de nosotros, los jugadores, cuánto estemos dispuestos a invertir. Te hace madurar cada día. Así es como se madura».