El equipo de tercera división Rot-Weiss Essen ha alcanzado las semifinales de la Copa del Bajo Rin. Sin embargo, Christoph Dabrowski sólo está satisfecho en parte.
El Rot-Weiss Essen no tuvo una tarea fácil el miércoles por la noche en su misión de defender su título: el equipo de tercera división recibió al ambicioso KFC Uerdingen de la Oberliga en los cuartos de final de la Copa del Bajo Rin, en un Grotenburg con casi todas las localidades agotadas.
Los 8.205 espectadores presenciaron un gran partido con muchas ocasiones de gol. Tras 94 minutos, los visitantes se impusieron por 3:1 (0:1) y se clasificaron para las semifinales en casa del club de la Oberliga Ratingen 04/19.
Sin embargo, esta victoria fue un trabajo duro, ya que el RWE jugó mal en la primera parte y, en consecuencia, se puso 0:1 por detrás. Sólo mejorando su rendimiento tras el descanso pudieron los favoritos cumplir con su deber.
El entrenador del Essen, Christoph Dabrowski, había introducido cinco cambios en su once inicial con respecto a la derrota por 3-1 contra el SpVgg Unterhaching y tuvo que hacer más ajustes en el descanso: El ex profesional habló claro en el vestuario y cambió a un sistema 3-5-2, con éxito.
«En general, el primer tiempo fue demasiado poco. Eso se notaba. Independientemente de si se trata de la Oberliga o de la Landesliga, se necesita voluntad para correr, intensidad en las entradas y agarre. Todo estaba a medias. Ni pescado, ni carne. No conseguimos hacer circular el balón a través de los cuatro defensas de tal manera que pudiéramos liberar a los ocho de atrás para superar al extremo con determinación y ofrecer también carreras en profundidad. Por eso optamos por una formación de tres hombres. Lo hicimos mucho mejor en la segunda parte», explicó el técnico de 45 años.
Posicionamiento, intensidad defensiva, cierre lejos del balón. Son cuestiones que nos afectan y en las que tenemos que mejorar. Pero por ahora, estamos contentos de haber ganado el partido y haber pasado a la siguiente ronda.
Christoph Dabrowski
Dabrowski continuó: «Luego defendimos hombre a hombre. Eso también fue peligroso. Tuvimos suerte de no encajar el 2-1. Defendimos demasiado descuidadamente por fuera. La defensa posterior, la intensidad defensiva, el cierre lejos del balón. Son cuestiones que nos afectan y en las que tenemos que mejorar. Pero por ahora, estamos contentos de haber ganado el partido y haber pasado a la siguiente ronda».
Los rojiblancos continúan el domingo por la tarde (10 de marzo, 16:30). Los de Dabrowski viajarán al Sportclub Arena para enfrentarse al SC Verl. Tras la derrota por 5-0 en el partido de ida, el RWE aún tiene algo que recuperar y, después de tres últimos partidos de liga sin ganar, le gustaría volver a sumar por fin tres puntos para no perder del todo el contacto con la cabeza de la tabla.