Con Kacper Koscierski y Cajetan Lenz, dos talentos de la cantera del VfL Bochum formaron parte de la convocatoria para el último partido. Su entrenador sigue persiguiendo un objetivo.
El VfL Bochum no tenía muchos motivos para alegrarse en el inicio de la nueva temporada de la segunda división. El equipo, recién descendido de la Bundesliga, decepcionó en todos los aspectos y perdió claramente por 1-4 su primer partido oficial contra el SV Darmstadt 98. Sin embargo, hubo una buena noticia: en el Böllenfalltor debutó Cajetan Lenz, otro talento de la cantera del club, con el primer equipo. El centrocampista defensivo no pudo cambiar el rumbo de la derrota, ya que entró en el campo en los últimos minutos (minuto 83). Kacper Koscierski, otro producto de la cantera, también se sentó en el banquillo del equipo azul y blanco. El trabajo de la cantera del Bochum sigue dando sus frutos, lo que alegrará especialmente a los formadores y promotores de los jugadores. Al fin y al cabo, esa es nuestra misión. Aunque el desarrollo del partido y el resultado no hayan dado muchos motivos para alegrarse». Con unos días de distancia, el debut en la segunda división fue muy especial para él. «Por supuesto, esto nos enorgullece mucho. El objetivo sigue siendo llevar a los chicos a lo más alto».
Lenz, nacido en Bochum, volvió a hacer «grandes progresos físicos y atléticos» en su último año como juvenil, según reveló Siebers. Siempre ha tenido cualidades futbolísticas. Por lo tanto, para el entrenador no es una gran sorpresa que Lenz esté progresando tan rápido y que ya haya disputado sus primeros minutos con los profesionales al comienzo de la temporada.
Además de Lenz y Koscierski, hay otros talentos que llevan tiempo en el círculo de los profesionales. Por ejemplo, Darnell Keumo y Alessandro Crimaldi pudieron participar en la concentración de verano en Scheffau (Austria) y, por lo tanto, estuvieron presentes durante gran parte de la preparación de los profesionales de la segunda división. No obstante, por el momento ambos siguen estando plenamente comprometidos con la temporada sub-19.
«Esto tiene un gran impacto en el equipo», afirma Siebers en referencia al equilibrio que deben encontrar los jóvenes profesionales entre el equipo juvenil y el profesional. El técnico de 37 años tiene que reorganizar los planes a corto plazo en función de la disponibilidad del personal. Además, su tarea consiste en seguir motivando a los talentos para que sigan en las categorías inferiores después de haber probado el aire profesional: «
Por suerte, llevo mucho tiempo acompañando a los chicos, así que sé que tienen un carácter impecable y que dan lo máximo en su trabajo. También se comportan con humildad hacia sus compañeros de equipo y son recibidos con los brazos abiertos. Solo así se puede lograr un buen rendimiento en equipo». Al menos en la primera jornada de la liga juvenil de la DFB, la química en su equipo parecía más que buena: el VfL Bochum sub-19 comenzó la temporada de forma brillante con una convincente victoria por 5-0 sobre el Rot-Weiss Essen.