Ya es el mejor Mundial de Lionel Messi hasta la fecha. Lo único que falta es la coronación. La superestrella lleva a Argentina a la final con una victoria por 3-0 sobre Croacia.
La superestrella argentina Lionel Messi está a una sola victoria de su ansiado primer título mundial. El seis veces futbolista mundial condujo a su equipo a una clara victoria por 3-0 (2-0) sobre Croacia en la primera semifinal de este Mundial, el martes por la noche. El primer gol lo marcó el propio Messi en el minuto 34 de penalti. El delantero de 35 años asistió a su compañero Julián Álvarez (39./69.) en los goles del empate a dos y del empate a tres.
Ante 88.966 espectadores en el Estadio Lusail, los croatas sólo pudieron hacer frente a la clase individual de los dos delanteros argentinos en los primeros compases. Además, se quedaron fuera de la final por segunda vez consecutiva, porque este equipo de nervios de acero cometió errores defensivos cruciales.
Argentina espera ahora a su último rival, el miércoles por la noche: el defensor del título, Francia, o la gran sorpresa del Mundial, Marruecos. Los sudamericanos ya ganaron el título en 1978 y 1986. El propio Messi, sin embargo, nunca llegó más allá de la final de 2014, que perdió 1-0 contra Alemania, en sus cuatro participaciones anteriores en la Copa Mundial. El martes por la noche volvió a confirmar que su quinta Copa Mundial hasta la fecha es, con diferencia, la mejor.
El partido contra Croacia, finalista de 2018, también comenzó con el delantero del París Saint-Germain igualando un récord mundialista de 24 años establecido por Lothar Matthäus. Ambos han disputado ya 25 partidos en un Mundial. Sin embargo, Messi aún está a cinco goles del primer puesto en la lista de goleadores de todos los tiempos de la Copa Mundial. Miroslav Klose ocupa el primer puesto con 16 goles.
Aparte de eso, nada salió según lo previsto para el número 10 de Argentina, al menos al principio. Messi se agarró varias veces la parte posterior del muslo izquierdo a los pocos minutos y estiró los músculos. Además, al principio estuvo bastante aislado del juego, porque los croatas ya bloqueaban las líneas de pase en dirección a la superestrella y el apoyo de sus propios compañeros era bastante claro. El seleccionador Lionel Scaloni sacrificó al tercer jugador ofensivo en favor de una formación más defensiva, como había hecho en la victoria de cuartos de final contra Holanda.
Y así, los favoritos se vieron favorecidos por algo que ha ocurrido muy pocas veces en éste y en el último Mundial: una pérdida total de control croata. Antes del 1-0, el balón se coló bajo la suela de la estrella del Real Madrid Luka Modric en el centro del campo. El argentino Enzo Fernández centró el balón al delantero Álvarez, que recibió una falta del guardameta Dominik Livakovic en el área penal, y Messi transformó el lanzamiento en la esquina superior derecha de la portería.
El 2:0 sólo cinco minutos después llegó incluso tras un saque de esquina croata y una cadena de errores mucho más grave. Esta vez Messi tocó el balón para Álvarez, y dos defensas croatas lo superaron en el área. Su tan cacareada dureza y estabilidad defraudaron a los croatas en los minutos cruciales de una semifinal de la Copa del Mundo.
Poco antes y poco después del descanso tuvieron dos veces suerte de no tragarse un tercer gol muy rápido. Alexis Mac Allister (43′) y Messi (58′) no lograron batir a Livakovic, que reaccionó bien.
Los croatas se lanzaron ahora a por casi todo lo que su banquillo de suplentes podía ofrecer: Mislav Orsic, Nikola Vlasic y Bruno Petkovic, el autor del gol tardío del partido contra Brasil, entraron en juego hasta el minuto 50. Sin embargo, los finalistas del Mundial 2018 no se volvieron más peligrosos por ello. Tras unos primeros 20 minutos convincentes, Croacia se mantuvo completamente inofensiva y sin ideas. Ni siquiera su co-entrenador Mario Mandzukic, responsable de los atacantes de la plantilla, pudo ayudarles más: El ex goleador del Bayern vio la tarjeta roja por protestar en el banquillo (35º).