El VfL Bochum sigue luchando contra sus rivales directos en la parte baja de la Bundesliga. Ahora llegan de nuevo rivales de mayor calibre – ¿afortunadamente?
Después de las últimas semanas exitosas con siete puntos en tres partidos, el VfL Bochum volvió a ofrecer una floja actuación contra el vigente colista. Al igual que en el derbi de Revier contra el FC Schalke, el partido contra el VfB Stuttgart también se perdió el domingo de Pascua. El patrón es inconfundible.
El balance contra los rivales directos de la parte baja de la Bundesliga es más bien modesto esta temporada: cinco derrotas con sólo dos victorias. Siempre que los rivales ocupaban los puestos 16º, 17º o 18º, abandonaron el campo contra el VfL como vencedores. Se perdieron los dos partidos contra el Schalke y el Stuttgart, contra el Hoffenheim al menos se tomaron la revancha de la derrota de la ida.
El Hertha BSC ya había sido derrotado en la ida. Así las cosas, el partido de la 33ª jornada podría tener, por tanto, un significado muy especial. Así que la pregunta es: ¿podrá el VfL ser sólo un outsider?
«Eso parece, pero no lo es», respondió el entrenador del VfL, Thomas Letsch, tras la derrota en casa contra el Stuttgart. «No dejaré que le pase nada al equipo. Luchan, lo dan todo». Pero también lo hacen los rivales en los duelos por el sótano.
Letsch admite que el partido contra el Stuttgart fue diferente. «Tuvimos un 55% de posesión, en los otros partidos bastante menos. Ahí puedes centrarte más en jugar a la contra, lo que nos viene mejor.»
El entrenador prosiguió: «Somos un equipo al que le encanta atacar al rival y ganar balones». Los equipos del sótano, sin embargo, no le hacen el favor al Bochum de jugar planos atrás y caer en trampas de presión. El Stuttgart se mantuvo compacto defensivamente la mayor parte del tiempo y confió en sus veloces extremos, como le suele gustar al VfL. «En la primera parte no encontramos buenas soluciones», dijo Letsch, falto de coraje en la ofensiva. «El balón largo puede ser un medio, pero entonces tiene que estar preparado. A menudo no lo estaba». Dijo que le recordaba un poco a la racha de cinco partidos perdidos a principios de año.
La reacción a aquello, sin embargo, fueron los ya mencionados siete puntos en tres partidos. Con el Union Berlin, el VfL Wolfsburgo y los Borussia de Dortmund y Gladbach, en los próximos partidos esperan cuatro equipos de la mitad superior de la tabla. El balance de la ida está igualado, con dos victorias y dos derrotas, y el VfL podrá volver a sentirse cómodo en su papel de no favorito.
Por eso Letsch no quiso sobrevalorar la derrota contra el Stuttgart, aunque naturalmente dolió. «Ya hemos estado fuera dos veces. El Hoffenheim parecía que ya se había ido, el Schalke también, el Stuttgart ahora también… y todos siguen ahí. Y así seguirá siendo hasta el final».