Los más altos jueces europeos han asestado una dura derrota a la UEFA. No podrán prohibir una Superliga desde el principio. Con ello se pone fin al monopolio de las asociaciones, y el tribunal acusa a la UEFA y a la Fifa de «abusar» de su posición dominante en el mercado.
En contraste con los titulares sobre la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) contra la UEFA y la FIFA, el propio Tribunal subrayó que su fallo no significaba un respaldo al proyecto de la Superliga.
«El Tribunal ha confirmado que este caso nunca fue sobre la Superliga, sino sobre los poderes de la UEFA y su alcance», dijo Miguel Poiares Maduro, profesor de Derecho en el Instituto Universitario Europeo de Florencia.
El tribunal dictaminó claramente que las prácticas de la UEFA constituyen un abuso de posición dominante.
«Es un mensaje claro del Tribunal de que las entidades con poderes reguladores o cuasirreguladores en virtud de la legislación de competencia de la UE serán examinadas, y muy de cerca», declaró a Forecasting Pablo Ibáñez Colomo, catedrático Jean Monnet de Competencia y Regulación de la London School of Economics (LSE).
Según Colomo, a partir de ahora este escrutinio estricto se aplicará a una autoridad pública, una organización deportiva o incluso un grupo de empresas en una posición comparable a la de una autoridad reguladora.
«El mensaje del Tribunal a las federaciones deportivas fue muy claro: recuerden que son empresas y están sujetas al Derecho de la competencia», dijo la abogada especializada en competencia Viktoria Tsvetanova, asociada del equipo de competencia de Dentons.
La sentencia parece restablecer la supremacía de las normas de competencia y entra en contradicción con las exenciones de la legislación antimonopolio para las federaciones deportivas europeas analizadas en las conclusiones del Abogado General del TJCE Athanasios Rantos sobre el caso en diciembre de 2022.
Rantos señaló que el artículo 165 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE) prevé un «reconocimiento constitucional» especial para el deporte, que se refiere a la obligación de la Unión de «desarrollar la dimensión europea del deporte garantizando la equidad y la apertura de las competiciones y la cooperación entre los organismos responsables del deporte».
«Su interpretación fue rechazada de forma brutal y bastante clara por el Tribunal», dijo el Dr. Antoine Duval, investigador principal del Instituto Asser de Derecho Internacional y Europeo, añadiendo que el artículo 165 no fue mencionado ni una sola vez en la sentencia.
¿Qué significa la sentencia en la práctica?
Según la abogada Tsvetanova, la sentencia significa sobre todo que las federaciones deportivas tendrán que revisar sus reglamentos, en particular en lo relativo a la autorización de eventos, las sanciones a jugadores y clubes, las normas de arbitraje y su jurisdicción exclusiva.
«Hay una lectura restrictiva que significa que la UEFA/FIFA debe, en cierto sentido, replantearse necesariamente algunas de sus prácticas», dijo el profesor Colomo, quien señaló que otras federaciones deportivas se basan en una estructura piramidal monopolística o cuasi monopolística que establece las normas para todos en esos deportes.
Sin embargo, la Asociación Europea de Fútbol restó importancia al impacto de la sentencia y subrayó tras conocerse el veredicto que no se trataba de un respaldo o confirmación de la Superliga.
Según la UEFA, la sentencia subraya las deficiencias del sistema de homologación de la asociación, que ya fueron reconocidas y rectificadas en junio de 2022.
«La UEFA confía en la solidez de sus nuevas normas, en particular en que cumplen con todas las leyes y reglamentos europeos pertinentes», dice el comunicado de la asociación.
«Me preocupa esta reacción inicial, que subestima el alcance de las reformas que deben aplicar para cumplir los requisitos del Tribunal», comentó Maduro, ex funcionario de la FIFA.
El Tribunal reconoció claramente la importancia del deporte y de un modelo con una estructura piramidal con una organización en la cúspide a la que se confían poderes de regulación y concesión de licencias, prosiguió Maduro: «Lo que el Tribunal considera muy negativo es la forma en que la Uefa ejerce actualmente sus poderes de regulación y concesión de licencias, ya que conduce a aspectos discriminatorios arbitrarios». «
Una puerta abierta
La otra consecuencia importante de la sentencia es que abre la puerta a cualquier otra organización que pueda plantear modelos alternativos, continuó Maduro.
«Si estos modelos alternativos demuestran ser mejores que el de la UEFA, por ejemplo en el reparto de los ingresos de las competiciones, entonces la UEFA no puede imponer su sistema de forma arbitraria», dijo.
Inmediatamente después de la sentencia, Bernd Reichmann, Director General de la empresa de desarrollo deportivo A22, presentó las principales características de un proyecto revisado de Superliga europea.
«Hoy hay una gran noticia, y es que el fútbol es libre. Libre del monopolio de la UEFA, libre para perseguir las mejores ideas sin temor a sanciones», afirmó. Las principales novedades de la nueva propuesta de Superliga europea son los ascensos y descensos y la posibilidad de retransmitir gratuitamente todos los partidos.
Sin embargo, varios clubes de fútbol, entre ellos el París Saint-Germain, el Bayern de Múnich, el Manchester United, el Atlético de Madrid y el AS Roma, se han distanciado hoy públicamente del proyecto, afirmando que nunca se unirían a él.
A pesar del escepticismo hacia la Superliga, la sentencia supone un hito en cuanto a las posibilidades de crear competiciones alternativas.
«Creo que el poder de negociación se ha desplazado en cierta medida», afirma Colomo, que subraya que la sentencia puede provocar una «inclinación natural de algunos jugadores dentro de la pirámide a desafiar algunas de las reglas».
Para Colomo, esto no se limitará al fútbol, sino que será una invitación para que muchos desafíen ciertas prácticas siempre que crean que una organización en una posición comparable a la FIFA o un regulador en general está infringiendo sus derechos.