Duele mucho pensar en la situación actual del Schalke. Porque en su momento fue una temporada extremadamente buena, todo hay que decirlo
Leon Goretzka
Goretzka jugó once años en el VfL y luego cinco en el S04 antes de fichar por el Bayern de Múnich en 2018 en una transferencia gratuita. «Fue una época muy buena», dice de su tiempo con los azules reales. «A veces teníamos cinco jugadores menores de 20 años en el campo y jugábamos muy bien en la delantera y en la Liga de Campeones».
El Schalke luchó sin éxito por retenerle durante mucho tiempo. En vano. Goretzka se convirtió en uno de los muchos jugadores importantes que podían abandonar el club en traspaso gratuito en aquellos años, y al hacerlo, también contribuyó a las dificultades financieras. Hoy sufre junto con Knapp: «Es extremadamente doloroso pensar en la situación actual del Schalke. Porque en su momento fue un periodo extremadamente bueno, todo hay que decirlo».
No esperaba este colapso. Ni siquiera cuando, de repente, Domenico Tedesco tuvo más éxito. «Estaba seguro al cien por cien de que continuaría. Sobre todo porque no se veían todos los peligros de que los grandes jugadores se volvieran locos de alguna manera o dejara de existir la cohesión, porque ésa era ya la clave del éxito», echa la vista atrás Goretzka. «Así que me costó entenderlo. Además, hablé con mucha gente. Pero, como suele ocurrir, nadie tenía una explicación real».
El FC Schalke 04 se juega ahora el descenso a segunda división, tras bajar de la Bundesliga por segunda vez en tres años, mientras que el VfL Bochum juega en la Bundesliga por tercer año consecutivo. Hace diez años, nadie habría pensado en este