Jan-Luca Rumpf pasó del Fortuna Köln al Alemannia Aachen en verano. El viernes regresa por primera vez al lugar donde jugó durante tres años.
El Alemannia Aachen lleva cinco partidos sin perder, pero sólo ha logrado una victoria en ese tiempo. Combinado con sólo cuatro puntos en los cuatro primeros partidos, esto significa que uno de los máximos favoritos de la Regionalliga West sólo es undécimo tras nueve jornadas.
Después de que los responsables reaccionaran al principio de la temporada, separándose del entrenador Helge Hohl e instalando poco después a Heiner Backhaus como nuevo técnico, el equipo al menos ya ha conseguido estar más seguro en la retaguardia. «Creo que ante todo era importante para nosotros conseguir estabilidad defensiva. Ya hemos dado algunos pasos adelante en ese sentido», afirma el central Jan-Luca Rumpf al hacer balance de las últimas semanas. «No encajamos muchos goles y, cuando lo hicimos, remontamos rápido, como la última vez contra el Colonia II».
Sin embargo, parte de la culpa del partido de la semana anterior la tuvo el hecho de que el Aquisgrán no lograra marcar el primer gol en más de 70 minutos de prórroga. Tampoco lograron marcar un penalti para hacer el 2-1. «Forma parte de nuestra situación general, quizá no tuvimos la suerte suficiente para lanzar el penal y ganar el partido», declaró Rumpf, pero también explicó: «No obstante, creo que no hemos creado suficientes ocasiones. Sólo tenemos que ser un poco más directos en el último tercio y aprovechar las ocasiones que tengamos».
El recién llegado en verano espera que el Alemannia consiga pronto «desahogarse por fin de la frustración que, como es natural, tenemos tras el comienzo». Pero aunque «aún no se haya roto el nudo», el jugador de 24 años ve «buenos pasos adelante» con su equipo en las últimas semanas.
El central tuvo un comienzo difícil
En lo personal, las cosas también fueron difíciles al principio, tras su llegada procedente del Fortuna Colonia. «Por supuesto que tuve un mal comienzo y me perdí los dos primeros partidos por culpa de las lesiones. Entonces te quedas un poco atrás y tienes que ponerte al día. Después, desde mi punto de vista, quizá volví demasiado pronto contra el Gladbach II». Antes de eso, el hombre que jugó una vez en la Bundesliga con el SC Paderborn sólo había entrenado una semana.
A sus 90 minutos contra los Potros (2-2) siguió la debacle contra el Rot-Weiß Oberhausen, donde Rumpf volvió a ser titular, pero fue sustituido por Aldin Dervisevic tras un tempranero 4-0 en contra y una tarjeta amarilla en el minuto 26. «Fue todo muy desigual», resume Rumpf sus primeros días en Aquisgrán.
Sin embargo, bajo la batuta del entrenador Backhaus, el hombre de 1,90 metros es ahora el pilar. «Todo se ha asentado un poco. El nuevo entrenador me ha dado confianza y así puede seguir, por supuesto».
Rumpf advierte del juego fuerte y la defensa en Colonia
El mejor momento para hacerlo es el viernes por la tarde, cuando Rumpf se reúna con su antiguo club, el Fortuna de Colonia. «Muchos antiguos compañeros de equipo que se hicieron buenos amigos durante aquella época siguen jugando allí ahora. Sigo en contacto con ellos», explica el central, que el viernes por la tarde no pisará por primera vez el césped del Südstadion con la camiseta del Colonia. «Por supuesto que es extraño venir al Südstadt como jugador rival», se adelanta Rumpf tras sus tres años en el Fortuna.
Sin embargo, se centra naturalmente en encarrilar por fin su carrera con los de Aquisgrán. «Por supuesto, sé que el Fortuna será muy fuerte en cuanto a juego. Ellos también llevan una buena racha y, en consecuencia, tendrán mucha confianza en sí mismos. Por eso será importante para nosotros, ante todo, mantener el tipo. Tenemos que romper un poco su ritmo», exige Rumpf. El de Wiesbaden también espera que el equipo de Colonia sea fuerte defensivamente, después de todo, con sólo cinco goles encajados, forma la defensa más sólida de la liga hasta el momento. «Por eso no tendremos muchas ocasiones y luego simplemente tendremos que aprovecharlas».