El Erzgebirge Aue, de tercera división, fue eliminado de la copa estatal en el derbi contra el Chemnitzer FC, de categoría inferior. La frustración fue grande.

Cuando se celebre la primera ronda de la Copa de la DFB la próxima temporada, el Erzgebirge Aue probablemente no estará en ella por primera vez desde 2010.

En la 3ª liga, los «Veilchen» están a doce puntos de los puestos de Copa DFB – es difícilmente imaginable que recorten esta distancia. Clasificarse ganando la copa nacional parecía más realista. Pero el FCE fracasó estrepitosamente en este empeño el miércoles por la noche. En cuartos de final, el Aue perdió 3-0 contra el modesto Chemnitzer FC ante 14.000 espectadores.

Aue no sólo perdió la oportunidad de ganar la copa, sino también el prestigio del derbi. La frustración de los aficionados fue correspondientemente grande. Los silbidos resonaron en el bloque visitante tras el pitido final, y el entrenador Pavel Dotchev declaró: «Esta derrota es difícil de digerir para mí. Quiero pedir disculpas a nuestros seguidores y al club por ello».

El Chemnitz se adelantó a los pocos segundos, y a los 13 minutos el FC Erzgebirge perdía por 0:2. Y a más tardar con el 0:3 en la fase final (83), el partido estaba decidido. Dotchev fue duro con su equipo: «Ha sido una actuación desoladora y no digna de nosotros. Se pueden perder partidos, pero no así. No puedo aceptarlo. Es triste lo que hemos hecho».

El entrenador récord de la 3ª división, sin embargo, tuvo palabras de elogio para su rival. «El Chemnitz demostró cómo hay que afrontar un partido así», dijo Dotchev sobre el séptimo clasificado de la Regionalliga Nordost. «Nosotros fuimos exactamente lo contrario. Cometimos muchos errores, jugamos de forma muy complicada, tuvimos poco acceso y perdimos mucho el balón.»

Para el Aue, fue el segundo revés en poco tiempo en lo que en realidad fue una etapa exitosa. Dotchev condujo al club desde la zona de descenso hasta la mitad de la tabla tras su regreso en invierno. Sin embargo, tras cinco victorias en seis partidos, el pasado fin de semana sufrió una derrota en casa por 3-1 ante el 1860 de Múnich, y ahora la amarga eliminación de la Copa.

El sábado se verá qué ha conseguido la clara crítica de Dotchev. A continuación, los sajones reciben al SV Meppen, colista de la tabla.