El defensa Jason Togbedji tiene contrato con el Westfalia Herne desde la segunda mitad de la temporada y es uno de los puntos brillantes del equipo de Hayrettin Celik.
El Westfalia Herne sigue luchando contra el descenso en la Westfalenliga II. Todo es posible todavía. La distancia con la plaza de no descenso, ocupada por su rival local, el SV Sodingen, es de sólo cuatro puntos. Sin embargo, el Sodingen ha jugado dos partidos menos y aún puede ampliar su ventaja.
El entrenador Hayrettin Celik y su equipo quieren evitar el peor de los escenarios posibles, por lo que han realizado varios cambios en la plantilla durante el periodo invernal de traspasos. Entre otros, se fichó a Jason Togbedji, procedente del ETB Schwarz-Weiß Essen. El defensa de 21 años desempeñó desde entonces un papel importante y no se perdió ni un solo minuto de la segunda mitad de la temporada.
En el partido en casa contra el SC Neheim (2-3), al equipo de Herne se le escapó la victoria de las manos en el tiempo añadido y dejó escapar los segundos tres puntos consecutivos tras el 2-1 del FC Iserlohn. Un amargo revés, que primero hay que procesar mentalmente. «En realidad, tenemos que ganar el partido. Especialmente en la situación actual, es por supuesto muy amargo», dijo Togbedji.
Personalmente, las cosas le van bien al ex jugador juvenil del VfL Bochum. En el ETB, Togbedji no pasó del papel de jugador suplente y ahora puede demostrar su valía en la categoría absoluta con el Westfalia. «Me hace mucho bien jugar 90 minutos semana tras semana. Así recuperas tu propia confianza». Por eso le da igual en qué posición juegue. En los últimos partidos, el central formado fue desplazado por su entrenador al flanco izquierdo de la defensa.
Sobre la evolución del zurdo, Celik ha declarado: «Jason ha tenido la oportunidad de jugar con nosotros. Por supuesto, eso es bueno para él. Es un buen chico. Espero que siga así y que continúe marchando para nosotros».
Hay vida en el equipo
Jason Togbedji
Togbedji estaba visiblemente entristecido tras perder el partido en casa, pero al mismo tiempo dejó claro que los ánimos en el vestuario no seguirían así por mucho tiempo. No queda mucho tiempo para enterrar la cabeza en la arena. El próximo fin de semana, el Herne viajará al campo del RSV Meinerzhagen, cuarto clasificado (2 de abril, 15:30 horas).
El de Essen dio a la afición un poco de esperanza para los próximos partidos: «Hay vida en el equipo. No nos damos por vencidos y estamos convencidos de que podemos mantenernos en la liga. El equipo tiene calidad para ello. Sólo tenemos que seguir adelante. Entonces también nos recompensaremos, como hicimos contra el Iserlohn. «