Después de seis partidos sin ganar, el club de fútbol de tercera división VfL Osnabrück celebró una victoria por 1-0 sobre el RWE. Después, los protagonistas alabaron el ambiente.
El viernes por la noche, el VfL Osnabrück y el Rot-Weiss Essen se enfrentaron en Bremer Brücke. La última vez que los dos clubes tradicionales se enfrentaron en Osnabrück, en abril de 2006 en la 2ª división (4:1 para el RWE), 8.500 aficionados peregrinaron al partido. En esta ocasión, el número de espectadores que acudió a la 3ª Liga fue casi el doble. «Habrá un ambiente de lo más animado en el Bremer Brücke», subrayó el Osnabrück en un comunicado de prensa previo al partido. Y eso es exactamente lo que ocurrió. Un total de 15.203 aficionados crearon un ambiente especial iluminado.
El equipo de Essen había agotado por completo el contingente de invitados de 1.400 entradas y el VfL también atrajo a más espectadores al estadio que en sus tres anteriores apariciones en casa, contra el Saarbrücken, el FC Ingolstadt y el primer partido contra el MSV Duisburg. No se arrepienten de haber venido. Porque: el Osnabrück derrotó al RWE por 1-0 (0-0) en un disputado partido y celebró su segunda victoria de la temporada.
Viernes por la noche, con focos, en Bremer Brücke: un gran ambiente en ambos campos. También vinieron muchos Esseners.
Omar Haktab Traoré.
El alivio fue igualmente grande entre los púrpuras y blancos, incluido el lateral derecho Omar Haktab Traoré. «El viernes por la noche, los focos, el Bremer Brücke… fue un gran ambiente por parte de las dos aficiones. También acudieron muchos aficionados de Essen. El partido fue acalorado, con muchos duelos. Tomamos la delantera en el momento adecuado. Ha sido una victoria trabajada contra un buen rival», declaró el jugador de 24 años a RevierSport. Traoré contribuyó en gran medida a la victoria con su asistencia a Ba-Muaka Simakala (35º).
Para el entrenador del VfL, Tobias Schweinsteiger, era su primer partido en casa en el Bremer Brücke. El entrenador se mostró encantado con el ambiente: «Fue sensacional. Tuvimos fases muy, muy difíciles, sobre todo en la segunda parte, pero la afición no dejó de empujarnos. Fue muy emotivo. No se olvida su primera victoria como entrenador en Alemania. «