El Rot-Weiss Essen, equipo de la tercera división alemana, cayó por 0-4 ante el Hansa Rostock. El portero Jakob Golz se mostró consternado.

Solo tres días después de la decepcionante, pero merecida, derrota por 1-3 en casa contra el SC Verl, el Rot-Weiss Essen visitó al Hansa Rostock, equipo de segunda división en crisis. Era la primera vez que el RWE visitaba el Ostseestadion desde 2006.

Fue un día para olvidar: el RWE sufrió una goleada por 0-4 en el duelo por el descenso. Al Essen le faltó precisión y determinación en ataque, y la defensa se mostró muy permeable. El hecho de que Jakob Golz fuera el mejor jugador del Essen, con cuatro goles encajados, lo dice todo. El portero evitó una derrota aún mayor con muchas buenas paradas.

Tras el partido, Golz se mostró visiblemente afectado en una entrevista con «Magenta Sport»: «Sinceramente, no tengo palabras. Hemos concedido demasiado, hemos aprovechado muy poco nuestras ocasiones y luego nos han machacado».

Los aficionados del RWE apoyaron a su equipo durante todo el partido, algunos incluso llegaron en un tren especial durante la segunda parte. Después, la decepción en la grada visitante era, como era de esperar, enorme. Golz se mostró comprensivo:

Solo podemos pedir disculpas a nuestros aficionados. Lo que hemos hecho hoy aquí, con este 0-4, ha sido una locura. Todos están decepcionados, enfadados, consternados.

Jakob Golz.

«Solo podemos pedir disculpas a nuestros aficionados. Lo que hemos hecho hoy aquí, con ese 0-4, ha sido una locura. Todos están decepcionados, enfadados, consternados. Tenemos que asimilarlo y empezar de cero. Necesitamos puntos, eso está claro. Porque estamos abajo. Tenemos que darlo todo juntos».

El Rot-Weiss continuará el próximo sábado (2 de noviembre, 14:00 h) con el partido en casa contra el recién ascendido Energie Cottbus.

El equipo de Lausitz es la gran sorpresa positiva de lo que va de temporada y, con 26 goles, tiene el segundo mejor ataque de la 3.ª división. Mañana (27 de octubre, 13:30 h), el equipo del entrenador Claus-Dieter Wollitz se enfrentará en casa al 1860 Múnich. Ya no hay excusas, el RWE tiene que darlo todo.