El MSV Duisburg logró un empate a 1-1 contra el SV Wehen Wiesbaden, segundo clasificado. Las voces de los entrenadores.
1-1 tras 90 intensos minutos en el duelo de la 33ª jornada de la 3ª división entre el MSV Duisburg y el SV Wehen Wiesbaden.
Durante mucho tiempo, el Wiesbaden fue por delante gracias al gol de Johannes Wurtz (26), pero un empate tardío de penalti transformado por Kolja Pusch (89) impidió al equipo de Wiesbaden recortar distancias con el líder, el SV Elversberg, y situarse a un solo punto.
Aun así, la primera parte fue muy positiva, como reconoce su entrenador, Markus Kauczinski: «Creo que, en general, he visto un empate justo. Esperábamos un Duisburgo luchador, y eso es exactamente lo que ha demostrado. Después de un rato, tuvimos buenos ataques, que también se tradujeron en el gol para nosotros. Después, dejamos muchas oportunidades al contraataque y se quedó en 1-0».
El entrenador de los candidatos al ascenso vio las cosas de otra manera en la segunda parte: «No estoy satisfecho con los segundos 45 minutos. No creamos mucho desahogo, los balones volvían demasiado rápido al MSV. Nos plantamos bien atrás, pero seguía siendo peligroso. Y luego llegó lo que tenía que llegar. No actuamos con inteligencia y por eso empatamos el partido. «
Mientras el Wiesbaden llora la pérdida de un triplete, el MSV Duisburg celebra un punto importantísimo en la parte baja de la tabla. El punto y el debilitamiento de los perseguidores amplían a siete puntos la ventaja del Duisburgo sobre el primer puesto de descenso.
Tras la derrota por 0:5 en el último partido en casa contra el Borussia Dortmund II, el entrenador Torsten Ziegner esperaba, no obstante, una actuación diferente en la primera parte: «El primer tiempo fue demasiado aburrido para lo que queríamos hacer. El Wiesbaden se plantó bien y dispuso de algunas situaciones. Jugamos demasiado despacio. En consecuencia, no tuvimos ninguna ocasión».
Tras el descanso, los 9.214 espectadores vieron a un equipo del MSV muy mejorado. Ziegner se mostró muy satisfecho con el resultado: «Durante el descanso, dijimos que queríamos poner más energía en el partido, y eso es lo que hicimos. Lo hicimos durante toda la segunda parte. Al final, nos vimos recompensados por ello, aunque bastante tarde».
Tras el empate de penalti en el minuto 90, las cosas se volvieron a desmadrar sobre el terreno de juego. Ambos equipos querían el gol de la victoria en los últimos minutos, pero nadie pudo recompensarse.
«Al final se vio que los chicos querían ganar el partido, lo que hizo que los últimos minutos fueran muy alocados. Eso no siempre es acertado y podemos estar contentos de no haber perdido el punto otra vez. Al final, tenemos y podemos vivir con el punto», se mostró de acuerdo Ziegner con el empate.
Para el MSV, se trata ya de encontrar un respiro en la parte baja de la tabla el martes (25 de abril, 19.00 horas) contra el Elversberg.